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jueves, 15 de junio de 2023

Amigo querido. (a JC)

(a JC) De la sequedad cruel amarilla del prado al verde florido en un chasquido de cielo que cae desde del puñal del marino. El agua gris que en el suelo negro hace de la estepa la esfera perfecta de la ciencia inexacta en nuestros cuerpos perenes, que como las hojas y el tiempo, en las arrugas deja sus llantos y risas, en un follaje viejo que crece inclaudicable y consecuente. Como el dia persigue a la noche y todo se hace siempre. En tus ojos estan mis dias, en tu recuerdo nace de nuevo un tallo fresco que será la sombra de algun alma en luna nueva. En la madrugada de este invierno llega el repunte que mejor devela en su agua el reflejo del sol, que es frio en la escarcha y caliente en los poros desnudos ante el nuevo firmamento azul, que deja ver las primerizas nubes arriba de las copas plateadas, de los arboles viejos. En su manto crecerán de nuevo las andanzas de los indefensos que alimentan la vida de sus seres tímidos, que andan por sus surcos húmedos, con sus pies descalzos. En la tierra que nos has dejado te hemos devuelto con una lagrima mojada una sonrisa eterna. Querido amigo. Hoy tu sangre en mis venas. Tu canto en ecos decididos. Tu nombre en la hierba como diria el poeta. La madrugada arranca muy fria y se va con la suerte del que se juega entero, volviendo del azar a la lucha caliente al encuentro del cenit enminente, en la faena del dia, en su devenir infinito. Todos los momentos son nuestros para ellos y los tuyos, de todos los tiempos por siempre. Gracias amigo por todo. Es lo menos que podré dejar en este escrito. Por lo que no podemos ya decirte ni con los versos solo con el hermoso discurso de tu paso por el camino
inmaculado. Jc.

miércoles, 7 de septiembre de 2022

Renacer.

Habia sentido como en partes me partía había sido una parte de todas ellas. Sola se recompone el alma, sin necesidad de una sonrisa y quizas en la oscuridad... Lo que se deja pasar puede durar mucho más que el tiempo, sin que corras ni sientas la necesidad de huir. Hubo un tiempo, un extraño periodo de dejar pasar todo. En ese espacio, en esos sonidos híbridos, ni tristeza ni alegría. El agua, la tierra, el silencio que rompe los vientos el solo espacio en la pausa mínima e intensa del renacer. Ese momento, todo empieza de nuevo.

martes, 31 de marzo de 2020

de la aurora.



Aquella sonrisa.
esa verde sensación de sanar mirando el campo, respirar el aire, sentir toda su fuerza, su alma.
el viento fuerte después de la lluvia, la aurora en pausa, mirándonos.

cada uno
uno solo en todos, en cada tono, en todos los colores de este nuevo sol.

El comienzo de este espacio, en la firme creencia del amor, en sus vacíos y laberintos, en el tierno beso esperanzador.

Y en esa sombra, del árbol que nos calienta, bajo la casa del suelo frío donde en la calma, la verdad no miente
nos acobardamos de enfrentar nuestras fieras, solos, cada uno, uno solo en todos, sencillamente mirando, lo que vendrá, ya sin miedo a que la por la espalda, la ira de la celebración de todo lo que no tenemos, por que no nos falta nada más, ni el pan, ni la duda, nada, solo nosotros, mirando ya sin miedo, todo lo que nos gusta en el suelo frío, en la suavidad de la aurora, el amor, el beso tierno que nos ilumina la fantasía cruel, esa canalla exigencia de ser feliz con todo, uno solo...si solo contigo, veo la aurora y entiendo al tiempo.

Aquella sonrisa.





martes, 10 de marzo de 2020

la esfera, la luna y el adios


La luna, la luna lleva mi luz, en la noche,
en el sonido del fin de ella, que se va apagando.

La luna, que de frío desespera en mi noche que florece el sonido del fin de todo el escudo.

El muro y el vacío, mudos, me miran en la noche del final donde aún la verdad me cuesta sentir.
Todo sonido de tu voz es poesía no escrita, y la suave vida minúscula de nuestras miradas, en esta noche, de luna fría, se va, de a gotas terminando como toda existencia que no solo espera la culpa... cumple con su condena.

Escribí en tu cuerpo el fuego que es ciego, casi siempre fui certero, no lo se. Quizás no todo se debe medir en tiempo.

La luna gigante me va guiando y caminando escribo estos versos, en el frío de la noche que se va apagando.
Las luces, el piso duro del norte de paris, todo en la luna que bajo su luz de adios, nos indica: es el adios, es el instante donde entregamos parte de nuestras vidas, para siempre.

Los pequeños jardines colgantes, flores, almas, voces, de todos los pasados de todas esas almas, y sus noches, sus lunas, la esfera y sus pedazos, sus finales y los jardines colgantes con sus flores que acercan todo lo que pueden para cobijarse.

Siempre estaré, en este pasado, caminando solo sobre el duro y frío suelo, de la piedra antigua, bajo la luz de luna de esta noche efímera, que será eterna, como el adios.




jueves, 2 de febrero de 2017

As the Philosopher says,

“The Pythagoreans are

Of the opinion that the shapes

Of the Greek vase are reflections

Of the irrational numbers

Thought by the Pure Mind. On the

Other hand, the Epicureans

Hold them to be derived

From the curves of a girl’s

Breasts and thighs and buttocks"

viernes, 28 de octubre de 2016

de nadie



El alma de febrero,
sus puñales
sus hadas.-
sus apuestas en las cartas de puño y letra,
todas sus vidas pasadas.-
Arrancándonos todo lo que perdimos, lo que no tuvimos ni lo que quisimos.

La mirada del verano que sin prudencia muestra su histeria en tu vientre, tus pechos,
el frenesí de las promesas y la luna.
Arrancándome un cada vez que toda tu mujer es.

No hay prisa en tu sonrisa.
No hay anden vacío.

Somos víctimas
Somos de nadie.

miércoles, 5 de octubre de 2016

una ventana



Dar tantas vueltas, es parte de todo ser, parte de su vanidad, de sus caídas y de todo lo que se va en ellas.
Ser de tantos lugares, sentir que el viento y lo que trae en parte, es cuestión de un ser que todo lo junta, si lo sabemos es por que lo sentimos por más minúscula sensación, por más pequeño latir de las células. En las flores, en las hojas, en los ojos llorosos de los niños, en la música hecha de escenas, inspirada en el silencio, sólo algo como eso, del ser que todo lo junta.

Su mar, su estar en la nada, suspensión del tiempo, parar, respirar, dormir sin cerrar los ojos. Cada pedazo de tiempo que se nos va volando sin parar, como gira el mundo en su eje, como gira el sol en un eje mayor, como todo va girando, cambiando y dejando atrás cada presente que se vuelve historia y que no vuelve.

El vapor de las aguas por el sol, el sol reflejado en las aguas, todo esta más allá que yo, que vos.

Mirábamos desde la ventana a la vida. Cada vez más. Ella nos va dejando y alejando.

Doy los pasos necesarios para salir, escaparme por completo. El miedo es la sal,
indivisible ser que todo lo junta

domingo, 21 de agosto de 2016

I

No cualquier persona puede ser el hidalgo. Dejar todo.
Todos podemos intentarlo, antes de levantarnos como Gergor Samsa.

viernes, 22 de julio de 2016

las piedras y las plazas



ta ta ta ta ta taaa ... ta ta ta taaaa

No se puede volver al tiempo atrás, decía durante el tarareo de aquella música. Era la musa, su musa.

Estaban tan desconectados de todo lo que uno tiene que desconectarse, stress, obligaciones, vida misma que deja de ser vida.- De alguna forma la ambición los había convertido y los había devuelto.

Cuando todo termina, hasta en el sol se siente el frío del vacío.


Uno solo.

Habían pensado en vivir lejos de todo vínculo con el pasado, el pasado que no muere en el paso del tiempo no es pasado. El pasado que es tan poderoso haciendo inventos diferentes, como la crecida del río, como la lluvia, como los corazones esperando, todo lo que se va, en algún ayer donde se dieron las manos, donde los ojos se volvieron a ver, donde cada pedazo es el paraíso que genera el calor de los cuerpos unidos, en esos fríos días, los días frente a la plaza, pasando el tiempo mirando el movimiento de gente anónima, con ella, con el, descubriendo secretos, deslizando los cabellos frescos sobre las ropas en el piso.-

Los rayos solares, calentando el suelo, el verde césped abrumado, cada viento hacía música, la savia de los árboles congelados, el ejercicio de rozar y morder, de besar y caer del uno al otro, hasta llegar a volver a empezar, la mística de lo indescifrable, de los pasos, de las sombras.

El ritmo y la conjunción, la verdad y todas las canciones que van quemándose, las manos en los bolsillos, como esperando un tren en el andén. Un perro viejo vagando con sus últimos pasos, mostrándonos en toda su mirada, enseñando que la libertad es una ventana abierta, aburrida mirándola de afuera, y la gente va paseando, con sus propias paranoias, sus propias metas caídas, cruzadas por copas que siempre van a romperse, desapareciendo todos los minutos sin amor, sin fuego, esa vista, esa verdad.

- Chiquita, decía el desde su interior. “el modo de ver las cosas cambia…”
- Lo sé.

Como todo el tiempo fue.
Como siempre.
Con todo.
Se fue.
Fin.

martes, 12 de julio de 2016

ANTES DE ELVIS NO EXISTÍA NADA.

J. LENNON.-